DESPEDIDA
Escribo lo que me falta de aliento,
lo que carezco de afecto
y lo que me falta por vivir.
Como molino a la mies,
como alondra a la rosa.
Mi esperanza se desgrana entre
momentos inacabados,
e insistencias por decir.
Como una límpida sustancia
de vida que el sediento aprende
a vivir.
Así se consumen las horas
y mi alma vuelve su rostro a la Luz,
colmado de lirios blancos
y sonrisas sin fingir.
Como cara de niño travieso,
una mañana florida marchare sin prisa,
sin volver la vista atrás.
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